¿Qué es Matalascañas?

Matalascañas es (a parte de una playa de la costa de Andalucía, sí) el nombre de una serie de blogs creados desde el 5 de mayo de 2005 que empezó como un blog para contar chorriguindeces personales y ha acabado, esto... siendo un blog donde se cuentan chorriguindeces a secas.

Durante su primera etapa, House of M (M de Matalascañas), era más bien un lugar privado para contar anécdotas estúpidas e intrascendentes sobre mí (y compañía).

Al comenzar Matalascañas (este mismo blog) en 2006, se empezó igual, para luego ir poniendo cosas más genéricas (sin abandonar el humor absurdo y las chorradas) mientras de vez en cuando hacíamos algo de más interés (como iniciar el movimiento Abrazos Gratis en Barcelona).

En 2008 la cosa había decaído (por culpa de fotolog, al que por supuesto, también me rendí con el nombre de MTLC) y decidí comenzar una nueva etapa con El Asombroso Matalascañas (actualmente fusionado con este blog), mientras que mi fotolog pasaba a retitularse El Espectacular Matalascañas), cosa que duró un año, hasta que, por supuesto, me volví a cansar.

Finalmente, a comienzos de 2010, Matalascañas se reactivó, esta vez dejando un poco los post chorras de lado y pasando a mostrar trabajos realizados durante el ciclo de realización de audiovisuales y espectáculos y otros obras, digamos, "artísticas". Entre medio de alguna que otra chorrada, por supuesto.

Al final, Matalascañas y sus derivados se pueden definir como una mirada excéntrica a un mundo pretencioso. El objetivo durante toda la etapa fue conseguir que la vida pareciera menos seria y convertir pequeñas cosas del día a día en un show.

Sobre el por qué de "Matalascañas"... fue un mote que me puso al azar un amigo haciendo el idiota cuando teníamos 14 años. No tiene sentido. Es irrelevante. Si has leido hasta aquí solo por saber eso, lo siento. Hay una versión extendida de esta historia en el primer post del blog, así que, buscadlo :D

Teniendo en cuenta que empecé esto con quince años, no esperéis mucha calidad al principio (bueno, ni en medio, ni... al final).

¡Curiosead lo que os apetezca, truhanes!